Bitcoin experimentó fuertes fluctuaciones a finales de diciembre, culminando un año con ganancias significativas, pero recordando la volatilidad inherente del mercado cripto.
El mercado de criptomonedas finalizó el año 2023 con una notable volatilidad, especialmente en el caso de Bitcoin, parece que este 2024 no será muy distinto pero a esta altura, ya todo se mira desde otro lugar esperando un 2025 que sin dudas será ya no solo histórico para la moneda sino para todo el ecosistema cripto.
Tras superar los 100.000 dólares el 5 de diciembre y alcanzar un máximo histórico de 108.319 dólares el 17 del mismo mes, Bitcoin experimentó una corrección, cayendo a cerca de 93.000 dólares el 23 de diciembre.
Desde entonces, se ha mantenido en un rango expectante entre 94.000 y 99.000 dólares, reflejando la continua incertidumbre del mercado donde diversos personajes «influyentes» teorizan diciendo que caerá estrepitosamente a menos de 70.000 dólares y otros anuncian que seguirá subiendo hasta los 200.000 y hasta 250.000 dólares.
A pesar de tantas palabras y esas fluctuaciones, Bitcoin cerró el año con un rendimiento impresionante, registrando un aumento del 157% en 2023 y un 128% en lo que va del año 2024.
Este crecimiento se vio impulsado, en parte, por el optimismo generado tras las elecciones de noviembre en Estados Unidos, con el presidente electo Donald Trump expresando su apoyo a políticas pro-criptomonedas.
Esta perspectiva positiva parece haber infundido confianza en el mercado de activos digitales, provocando un repunte generalizado.
Ethereum, la segunda criptomoneda más grande por capitalización de mercado, también experimentó un comportamiento volátil. Alcanzó un máximo de 4.721 dólares el 16 de diciembre, superando su máximo de 52 semanas, pero luego bajó a 4.800 dólares a finales de mes.
Si bien Ethereum ha experimentado un crecimiento del 49% en 2023, aún se mantiene por debajo de su máximo histórico de noviembre de 2021.
Las Cripto como cualquier otro Mercado
La volatilidad extrema de las criptomonedas es un factor fundamental a considerar para cualquier inversor. A pesar de las promesas iniciales de funcionar como cobertura contra la inflación, las criptomonedas se han comportado de manera similar a los índices bursátiles más amplios.
Es crucial para los inversores comprender la importancia de la gestión de riesgos, incluyendo el establecimiento de puntos de venta para proteger las ganancias o minimizar las pérdidas, y estar preparados para aprovechar las oportunidades de rebote que puedan surgir.
En resumen, el comportamiento de las criptomonedas a finales de 2023 subraya la naturaleza volátil y todavía inmadura del mercado.
Si bien las ganancias han sido significativas en algunos casos, la volatilidad y la correlación con los mercados tradicionales requieren una estrategia de inversión cuidadosamente planificada, con un énfasis en la protección de capital y la gestión de riesgos.